¿Quién no ha soñado con visitar París? La ciudad del amor, la ciudad de la luz, la ciudad de la moda. Se dice que hay que visitar París al menos una vez en la vida y está claro que todos queremos una foto en su monumento estrella: la Tour Eiffel. Sin embargo, París es mucho más que la Tour Eiffel, el Louvre o Notre Dame. La ciudad más romántica del mundo tiene mucho más que ofrecer. Por un lado, es un paraíso culinario, pues será por algo que, en el 2010, la UNESCO declaró la gastronomía francesa como patrimonio de la humanidad.

La cultura parisina es otra de las características que hace a París una ciudad única. La cultura del café, los museos y el arte son solo algunos de sus componentes. Puedes perderte entre los acogedores cafés de las calles de París, y es que cada lugar que te encuentras te invita a quedarte horas en sus terrazas y simplemente ver la gente pasar. Los museos y el arte también forman parte de la identidad cultural de la ciudad. Existen infinidad de tiendas en donde puedes disfrutar de pinturas, esculturas y todo tipo de ejecuciones artísticas. La oferta de museos tampoco deja nada que desear, es verdad que el Louvre es un museo icónico de la ciudad, sin embargo hay muchos otros que valen mucho la pena.

Los paisajes urbanos tampoco te decepcionarán si decides visitar París. Puedes encontrarte con retratos inolvidables en muchas de sus calles. En especial, las vistas desde la Place du Trocadéro, Montmartre o desde los puentes para llegar a la Île de la Cité. Por supuesto, también tienes las vistas desde lo más alto de la Tour Eiffel.

Sin embargo, esta vez no tuvimos la oportunidad de subir. ¡Una excusa más para regresar a la ciudad! (aunque nadie necesita excusas para visitar París).

En esta ocasión, presentamos nuestro recorrido de tres días por esta ciudad, empezando este artículo con el día 1. Pero si les interesa saber cuáles fueron nuestros preparativos antes de llegar a París y otros consejos útiles puedes suscribirte y esperar nuestro siguiente post: Preparativos para visitar París.

Visitar París: Desde Trocadéro hasta la Île de la Cité

Nuestro primer día en París empezó un poco tarde, ya que entre salir del aeropuerto y dejar las maletas no fue hasta el medio día que estábamos listos para empezar a recorrer la ciudad. Así que no perdimos tiempo y desde la parada de metro Oberkampf nos fuimos hasta la parada de metro Trocadéro.

Place du Trocadéro

Al ser mi primera vez en París, lo primero que tenía ganas de conocer nada más llegar a esta ciudad era la Tour Eiffel. Es por esta razón que, decidimos que la mejor opción para tener una hermosa vista de esta maravilla era desde la Place du Trocadéro. Efectivamente, a mi juicio, desde aquí tienes las mejores vistas de la Tour Eiffel, las cuales son impresionantes.

Sin embargo, a los pocos minutos de haber salido del metro empezaron a caer unas cuantas gotas de agua. Como punto positivo, eso hizo que la plaza se vaciara y nos permitió apreciar tranquilamente las vistas de la Tour Eiffel sin tanta gente. Cabe apuntar que, en verano, esta es una de las plazas más concurridas para buscar la foto perfecta con la Tour Eiffel de fondo.

Una vez hechas las fotos correspondientes y superado el asombro de ver la Tour Eiffel por primera vez, bajamos por los Jardins du Trocadéro y caminamos tranquilamente hasta llegar al pie de dicha torre.

Tour Eiffel

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Torre Eiffel. ©Nimman

Lastimosamente, en esta visita no pudimos subir a la torre ya que estaba cerrada para esos días. Por eso, recomendamos verificar primero la página web oficial de la torre donde se publican las tarifas, horarios y noticias excepcionales.

Los billetes para subir a la torre varían de precio por varias razones. Por un lado, dependerá si quieres subir al primer piso, al segundo o hasta la cumbre. Por otro lado, también hay tarifas diferenciadas para adultos, jóvenes, niños, grupos, estudiantes o profesores. Además, el precio va a variar si quieres subir en ascensor o subiendo las más de 900 gradas.

Dicho lo anterior, los billetes pueden adquirirse en las taquillas de la Tour Eiffel el mismo día. No obstante, es mejor comprarlos con anticipación por la página web oficial y así tener tu visita asegurada.

Está de más aclarar que la Tour Eiffel es uno de los imprescindibles al visitar París. Es, sin duda, de los monumentos más espectaculares de la ciudad, tanto si la ves de día como, especialmente, de noche.

Arc de Triomphe

arco de triunfo
Arco de Triunfo. ©Nimman

Luego de ver la Tour Eiffel y pasear un poco por sus alrededores, decidimos trasladarnos en metro desde la parada Bir Hakeim hasta la parada Charles de Gaulla-Etoile. Esta es la estación de metro más cercana para ver el Arco del Triunfo, otra parada que no puede faltar en tu visita a París. Es uno de los monumentos más famosos y más visitados de la ciudad. Su construcción fue ordenada por Napoleón Bonaparte y también alberga la tumba del soldado desconocido. Todos los días se enciende la famosa llama eterna del Arco del Triunfo a las 18:30 h.

Si te interesa ver una de las vistas más hermosas de París también puedes subir hasta arriba de dicho monumento. Las entradas pueden comprarse por directamente en el monumento o a través del Centro de Monumentos Nacionales y el billete normal de adulto cuesta 12€ ($14 USD).

En mi opinión, el Arco del Triunfo es una de las construcciones más interesantes de París. Sobretodo, debido a que, se trata de un monumento que tiene mucha historia y que ha sobrevivido a dos guerras mundiales.

Avenue des Champs-Élysées y Place de la Concorde

Desde el Arco del Triunfo decidimos pasear tranquilamente por la Avenida de los Campos Elíseos. Este es un paseo que es imprescindible en tu visita a París. Se trata de la avenida más importante de la ciudad y en su recorrido de casi dos kilómetros puedes encontrar de todo tipo de tiendas, restaurantes y cafés.

Es una avenida para todos los gustos. Tanto si quieres disfrutar de un buen paseo, como si quieres adentrarte en el mundo de las compras. Nosotros decidimos hacer una parada en esta avenida para comer. Debido a que teníamos buena parte de la ruta por delante, optamos por comer algo rápido en un Quick.

Una vez con la energía recargada seguimos disfrutando del paseo hasta que llegamos a la Place de la Concorde. Ésta se encuentra al final de la avenida, justo en dirección opuesta al Arco del Triunfo.

Se trata de una plaza muy bonita y una de las más importantes de la ciudad. Por una lado, notarás a simple vista el Obelisco. Este fue donado por Egipto y trasladado hasta París. El nombre completo es Obelisco de Lúxor, en honor al templo donde se encontraba. El obelisco está situado justo en el centro de la plaza y es un lugar también muy visitado por turistas. También podrás observar las fuentes marinas o fuentes de la concordia y otras esculturas que componen la plaza.

Jardin des Tuileries y Musée du Louvre

Siguiendo con nuestro recorrido de este primer día en París, seguimos en dirección al Musée du Louvre, no sin antes pasar por el Jardin des Tuileries. Estos jardines son uno de los parques más importantes de París, el cual está protegido por la UNESCO. Justo en el centro del parque se encuentra una fuente rodeada de sillas. Este es un lugar ideal para tomar el sol y descansar. Sin embargo, tienes que tener mucha suerte para poder conseguir un sitio ya que suele estar siempre muy lleno.

Atravesando el parque llegamos al Musée du Louvre, otro ícono por excelencia de París y uno de los museos más importantes de Francia. El edificio fue construido en el sigo XII y aloja uno de los cuadros más preciados del arte: la Mona Lisa de Leonardo Da Vinci. Por cuestiones de tiempo, en esta ocasión, no entramos al museo, pero es una visita recomendadísima. Debes tener en cuenta que, si deseas hacer uno de los recorridos del museo debes añadir por lo menos medio día a tu ruta.

Como en la mayoría de monumentos en París, también puedes adquirir tus entradas directamente en el museo o reservarlas por internet.

Si optas por no visitar el museo por dentro, siempre puedes entrar y dar una vuelta dentro de la Pirámide. Aquí tienes muchas tiendas de recuerdos, librerías y cafés. Las fotos que puedes encontrar por internet de la famosa pirámide del Museo de Louvre son espectaculares, sin embargo, no hay nada como verla con tus propios ojos.

île de la Cité: Sainte Chapelle y Notre Dame

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Notre Dame de París. ©Nimman

Nuestra última etapa de este primer día intenso visitando París es la Île de la Cité. Esta es una zona imprescindible de París. Tal como su nombre lo indica, es una isla a la que debes acceder a través de sus diversos puentes.

En dicha parte de la ciudad, tienes muchos puntos importantes que visitar. En este primer día, nosotros decidimos pasear tranquilamente por las calles en dirección a Notre Dame, no sin antes pasar conociendo la Sainte Chapelle.

La Sainte Chapelle es una capilla de estilo gótico cuya construcción comenzó en el siglo XIII. Lo más sorprendente de esta capilla son los hermosos vitrales que la rodean. Estos representan escenas del antiguo y nuevo testamento cuya conservación a través de los años es simplemente impresionante. Te aseguramos que no te arrepentirás de entrar.

Una vez visitada la Sainte Chapelle, nos dirigimos paseando tranquilamente hasta nuestra última parada del día: la Catedral de Notre Dame de París. Nosotros tuvimos la suerte de observar la catedral un mes antes del trágico incendio que destruyó parte de la estructura. La veas de donde la veas, la catedral es una de las más bonitas que hemos visitado. Sorprende mucho no solo su estructura, sino también el nivel de detalle de las puertas y torres. Además, te recomendamos observar con mucha atención las esculturas de las tan famosas gárgolas.

Tras pasar un buen rato contemplando la catedral, como aún era temprano decidimos finalizar nuestro recorrido de este primer día de París paseando por otra parte de la ciudad. En este sentido, decidimos caminar hacia el barrio de les Halles donde observamos también desde fuera el Centro Geroges Pompidou. Este es el Centro Nacional de Arte y Cultura y tiene un diseño muy peculiar. En lo personal creemos que la mejor forma de visitar y conocer una ciudad es a pie, por lo que se nos llegó la noche paseando por estas callecitas.

Luego de este super recorrido decidimos cenar cerca del hotel y dar por terminado nuestro primer día visitando París. Cabe decir que acabamos el día muy cansados, pero todo cansancio vale la pena si estás disfrutando de una ciudad tan bonita como esta.

Si quieres seguir leyendo nuestra Ruta de tres días para visitar París puedes ir a nuestro artículo del Día 2 en París: Una visita al mundo de Disney. Si lo deseas, también puedes ir a nuestro post del día 3 de esta ruta donde te contamos sobre Montmartre, La Fayette y la Bailica del Sacré Coeur.

También puedes dejarnos abajo tus comentarios con respecto a este artículo! Si ya has visitado París no dudes en contarnos tu experiencia y tus sitios preferidos.

3 Comentarios

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